Parto de esos vídeos y pongo
los enlaces, de modo que quien lo desee pueda ver y recordar –o descubrir si no
estuvo– lo que allí hicimos y vivimos. Como podemos verlo, no hablo más.
Antes de cada enlace pongo algo de su contenido.
La foto es el corazón de la ofrenda. Este nos representaba a
todos nosotros.
Agradecemos especialmente a Carlos por su acogida y
preparación de todo lo necesario y a Juanjo por su organización. (Ver los
enlaces más abajo)
Eucaristía. Con la rondalla…
9:00 Juanjo lee Mateo 25
10:30: homilía de Carlos
13:00 Juanjo dirige y presenta las ofrendas. Interviene Modesto
Ovejero y Herminio . Presentación del símbolo del corazón a los salesianos, a
Juanito en el recuerdo.
21:40 Nuestro corazón blanco sin nombre que nos representa a
todos nosotros. Dios tiene escrito nuestros nombres en su corazón. (Ver
la imagen)
29:10 La paz
36: Gracias, de Carlos.
40:00 Rendidos a tus plantas.
Final de la misa, salida, foto en la escalinata… Por ahí andamos
todos.
Entrada en el comedor y comida.
Comida abundante y generosa, con Juanjo de organizador y Carlos
de anfitrion. Pedro Merayo nos regaló unas buenas botellas de vino, pero
humilde como es, eso no está grabado. Brindis y cantos.
Intervención de Carlos López: Regalo en recuerdo de Juan L.
Sevillano con brotes de lavanda por su amor a la naturaleza y olor a noches
estrelladas.Inicio de sobremesa. Intervención de Herminio. Correo de Julio
Parrilla, obispo en Ecuador, de nuestro curso, y de Jerónimo de Andrés, nuestro
asistente y mentor de MCM, ahora párroco en Alcorcón. Fuero enviados y leídos
por Alfredo Roscales, el Gorrilla, desde el púlpito de una silla. “Erais los
mejores”. Felisindo y recuerdo de lso gallegos. La familia de
Carlos M. Celada. Felisindo con su armónica.
Sigue Felisindo. Y todos cantamos. Camariñas… Ovejita lucera. Se
desvela el misterio de lso pinchos en la fiesta de los antiguos alumnos del 66…
La mujer de Alfredo Roscales no lo sabía. … Las mozas suspiraban por nos
novicios, y nosotros sin saberlo dábamos vueltas al pueblo sin entrar. JA
Astorga, cocinero, saluda ala acocinera que nos preparó la comida suculenta… Esteban
Grijalbo se va. Y suela el Andiamo compagni… Laurentino recuerda lo de los
círculos en clase (competitivos a tope),, a Juan con sus figuras, recuerda un
chiste de Juanito Y Tamames, recita con temblor la oda a la libertad de
Atahualpa Yopanqui. Senén entona Castilla. Era el entonador oficial en el
noviciado (con Sálvame antes de los días de examen). Cuenta otros
recuerdos de su ida a Celanova (que después escribió). Y resume: “Lo que los
salesianos han hecho por mi: darme sentido a mi propia vida”. Javier F.
Pereira recuerda su apendicitis. Necesitaba el nombre del médico que recetaba
aspirinas: Don Joaquin., no don Sabino, que era el cura y confesor
extraordinario.
Ya había estado con 9-10 años en una colonia en Astudillo.
Carlos López recuerda el origen de del conocimiento de los
salesianos en Herrera, colegio con un diseño original: las goteras sobre los
calderos armaban una buena sinfonía musical. La presencia de los salesianos en
Herrera fue revolucionaria: enseñaban a cantar, a hacer teatro… Don Antonio
Álvarez estaba presente y recibe el agradecimiento….
HERMINIO O.
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