152 capitulares venidos de diferentes puntos de la
Inspectoría se dieron cita del 18 al 22 de marzo en la Residencia Fray Luis de
Léon de Guadarrama, en la segunda sesión del CI16, tras la primera en
diciembre.
La jornada del lunes se dedicó a los últimos trabajos del
CI16. Las comisiones estuvieron trabajando el sábado y domingo sobre las
aportaciones recibidas para cada documento. Estas aportaciones llegaban como
intervenciones escritas (que no se habían hecho en el aula) y las
intervenciones de los dos turnos de palabra que seguía a la presentación de
cada uno de los documentos.
Las comisiones fueron estudiando los diferentes modos y
reformando, en su caso, el documento previo. Ya el domingo por la noche se
envió a todos los Capitulares los documentos finales preparados para la
votación.
El lunes por la mañana, cada comisión presentó en el aula el
documento final. Los relatores fueron explicando las aportaciones que se habían
asumido, los cambios que se habían introducido y las razones de estos. A media
mañana se concluyó este proceso. El resto de la mañana se dedicó a un tiempo de
lectura personal de los textos para preparar las votaciones de la tarde.
De nuevo en el aula, toda la sesión de la tarde se dedicó a
las votaciones de los documentos. En total se enviaron diez formularios de
votación por correo electrónico. Poco a poco, en un trabajo disciplinado y
serio, los Capitulares fueron respondiendo y votando los documentos que fueron
obteniendo un refrendo ampliamente positivo.
Al terminar este día, el Inspector dirigió unas palabras
para clausurar el primer Capítulo Inspectorial de la nueva Inspectoría Santiago
el Mayor. Su intervención giró alrededor de cuatro palabras: gracias, comunión,
compromiso y esperanza.
Habiendo terminado los trabajos capitulares, la mañana del
martes 22 se dedicó solo a la Eucaristía de clausura. Aunque estaba previsto
terminar este día con la comida, el buen y ágil hacer de los Capitulares hizo
que no fuera necesario dedicar esta mañana.
En la Eucaristía de clausura, presidida por el Inspector,
estuvieron presentes también representantes de otros grupos de la Familia
Salesiana. Al final de la misma, se entregó una lámpara a cada comunidad como
recuerdo de este primer Capítulo de la nueva Inspectoría, con el compromiso, como
reza la frase que iba adherida, de ser “luz para llevar la salvación hasta el
confín de la tierra” y, como señaló el Inspector en la homilía, comunicar “a
los jóvenes, con transparente coherencia, el sentido de nuestra vida”.
http://www.salesianos.es/Articulos/7011/1/1/La-Inspector-a-cierra-su-primer-Cap-tulo-Inspectorial